Fuente: Engadget
Todo
el mundo anda en Frankfurt mostrando sus propuestas eléctricas y Audi
no iba a ser menos. La casa alemana se ha plantado en el Salón del Automóvil con su increíble y futurista Aicon,
un coche eléctrico con capacidades autónomas pensado para recorrer las
carreteras en el futuro y en el que el volante o los pedales son ya
historia.
Aicon, que se moverá con un alcance máximo de distancia de hasta 800 kilómetros, luce un interior de lujo
(su fabricante compara sus asientos con “los de primera clase”) con
sillas giratorias que se inclinan hacia atrás y controles táctiles
integrados, de forma que el automóvil se convierte en una opción
perfecta para conducir largas distancias durante la noche mientras que
los pasajeros descansan, por ejemplo. En principio estos asientos no
contarían además con cinturón de seguridad, ya que Audi imagina un
futuro en el que los coches se comunican continuamente entre ellos para
evitar accidentes.
Este EV utiliza, cómo no, el asistente de inteligencia artificial de Audi, PIA,
capaz de ofrecer diferentes servicios basándose en situaciones ya
aprendidas, y dispone de un sistema que soporta el seguimiento de los
ojos, los comandos de voz y los controles por gestos. Un pack con todo,
vaya.
Viendo el planteamiento, este Aicon suena a ciencia ficción
más que a otra cosa, pero su fabricante apuesta por poder llevarlo a
producción de aquí a unos (largos) años -si tienes que esperar que todos
los coches lleven sensores para su comunicación interna, va a tener que
echarle paciencia al asunto. Sea como sea, para lo que sí que no hay
que esperar es para ver el automóvil de cerca, un privilegio que te
ponemos en bandeja pantalla con la galería de fotos que tienes un poco
más arriba. Haz clic en la primera imagen y sueña despierto.
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