Fuente: The Associated Press
WASHINGTON
(AP) — Los líderes mundiales deberían aprovechar el crecimiento global
más robusto en varios años para aplicar medidas que lleven la
prosperidad a los que se quedaron atrás, afirmó la responsable del Fondo
Monetario Internacional.
“No
es el momento de ser complacientes”, dijo el jueves la directora
gerente del FMI, Christine Lagarde. “Los legisladores pueden aprovechar
este momento para dar más certidumbre y proveer ante riesgos futuros”.
Lagarde
hizo su advertencia mientras responsables financieros de todo el mundo
se reunían en Washington para las cumbres anuales del FMI, de 189
miembros, y su organización hermana de préstamos, el Banco Mundial.
Además,
una reunión de los titulares de Finanzas de las 20 economías más
grandes del mundo, el Grupo de los 20, terminaba el viernes. El
secretario del Tesoro, Steven Mnuchin, y la presidenta de la Reserva
Federal, Janet Yellen, representaban a Estados Unidos en esas
conversaciones.
Los
expertos del FMI esperan que la economía global crezca un 3,6% este
año, el ritmo más rápido desde 2010. Y Lagarde señaló que tres cuartas
partes de la economía global participan en el auge, creando la
recuperación más amplia en una década.
Pero
muchos trabajadores han visto cómo sus salarios se estancan y sus
empleos se ven sustituidos o amenazados por la tecnología. Muchos países
asisten a una creciente brecha entre ricos y pobres. “El resultado son
crecientes tensiones políticas en muchos lugares y un creciente
escepticismo sobre los beneficios de la globalización”, dijo Lagarde.
El
descontento con la globalización y la desigualdad dan alas a las
corrientes populistas que llevaron a Donald Trump a la Casa Blanca y
motivaron la decisión de los votantes británicos a inclinarse de
abandonar la Unión Europea. “Tenemos que reducir la brecha entre los que
lo tienen todo y los que no tienen nada”, afirmó el ministro francés de
Finanzas Bruno Le Maire.
Aunque
el FMI elevó sus previsiones para los 19 países de la Eurozona, Japón y
China, recortó ligeramente sus estimaciones para Estados Unidos en
comparación con las estimaciones de abril. Ahora prevé un crecimiento en
Estados Unidos de 2,2% este año y un 2,3% el próximo, aún por encima
del deslucido 1,5% del año pasado.
Los
economistas del FMI indicaron que la reducción en 0,1 puntos
porcentuales para 2017 y de 0,2 puntos porcentuales para 2018 refleja un
declive en la certeza de que el gobierno de Trump pueda aprobar su
reforma fiscal en el Congreso. Incluso antes de esas reducciones, la
previsión del FMI estaba muy por debajo de las tasas del 3% que la Casa
Blanca dice que se alcanzarán con sus cambios en política fiscal y
regulación y el endurecimiento de su normativa comercial.
Un
reporte del FMI concluyó el martes que muchos países podrían subir sus
impuestos a los ricos sin sacrificar crecimiento económico. Pero Lagarde
sugirió otra forma de reducir la desigualdad de ingresos: poner más
mujeres a trabajar, mejorar su acceso al crédito y reducir su brecha
salarial con los hombres. “Algo evidente”, dijo.
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