Sentinel1973
Los mercados siguen atentos a la reforma fiscal de Estados Unidos, que sigue acaparando la atención del mercado pues se espera que la etapa final tenga lugar esta semana, después de que el viernes, dos senadores republicanos que dudaban acerca del proyecto de ley, expresaron su apoyo al mismo, con lo que básicamente queda asegurada su aprobación a mitad de semana, allanando el camino para la firma del presidente de Estados Unidos, Donald Trump.
El debate sobre la eficacia de la medida aún no ha terminado; aunque todo apunta a que tanto los impuestos individuales como los corporativos descenderán inicialmente, la Comisión Mixta sobre Fiscalidad del Congreso calcula que el proyecto de ley hará subir el déficit federal en $1,460 millones los próximos más de 10 años antes de que pueda notarse ningún crecimiento económico como resultado.
Los economistas han proclamado a los cuatro vientos que las reducciones de impuestos no resultarán en mejoras para la economía pues calculan que la mayor parte de los beneficios irán a las corporaciones y a los ciudadanos estadounidenses más ricos, por lo que el dólar se debilitaba por la mañana contra la canasta básica de monedas, impulsando el valor del oro que tocaba los $1,259.18 dólares la onza, alejándose de su mínimo en varias semanas.
El metal se había visto fortalecido la semana pasada después de que la Fed subiera los tipos de interés en 25 puntos básicos hasta el 1.50% aunque no efectuó cambios en sus previsiones para 2018 de elevarlas 3 veces más.
En otras materias primas, el precio del petróleo subía por la mañana hasta los $57.50 dólares el barril al persistir la interrupción del suministro del oleoducto del Mar del Norte; además, una huelga de trabajadores petroleros nigerianos amenaza sus exportaciones de crudo y, según datos semanales de Estados Unidos, ha habido una disminución de la producción de petróleo de esquisto de la nación.
Además, los datos del proveedor de servicios energéticos Baker Hughes (NYSE:BHGE) publicados tras el cierre del mercado de este viernes indicaban que las empresas energéticas estadounidenses redujeron el total de yacimientos activos para la nueva producción por primera vez en seis semanas, hasta un total de 747, durante la semana que concluía este pasado 15 de diciembre.
El Dow Jones ganaba cerca de 160 unidades antes de la apertura mientras los inversores celebran la inminente aprobación de la reforma fiscal de Trump. Las bolsas de Estados Unidos cerraron el viernes en máximos históricos, respaldadas tras conocerse la aprobación de los republicanos. El índice cerró su cotización el viernes en los 24,651.71 puntos tras una ganancia de más de 120 puntos.
Las acciones de la empresa fabricante de “snacks” Amplify Snack Brands (NYSE: BETR) subía más del 70% desde los $7.00 dólares en los que cerró el viernes, después de que se anunciara que la empresa Hershey Co. (NYSE: HSY) anunciara que la adquirirá por un total de $1,600 millones de dólares, valorizando la acción en $12 dólares.
El día de ayer, el Chicago Mercantile Exchange (CME) ha lazando sus propios futuros de bitcoin este domingo tras la versión de su rival CBOE sólo una semana antes, con lo que se cree que podría propiciar aún más interés por la divisa digital.
Desde este lunes, el producto del CME permitirá a los inversores hacer apuestas sobre si creen que el precio subirá o bajará. El segundo lanzamiento de futuros de bitcoin de Estados Unidos se ve como un paso más hacia la aceptación de los grandes inversores institucionales de un activo volátil que hasta hace poco había sido accesible sólo a través de mercados en gran parte no regulados.
El Bitcoin que cotizaba en los $18,627.70 dólares, sigue teniendo detractores tras haberse disparado más de un 1,800% en lo que va de año en medio del furor por las divisas alternativas en general.
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