Fuente: Reuters
WASHINGTON
(Reuters) – El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, pedirá el
miércoles reducir los impuestos para los negocios y los ricos como parte
de un nuevo plan fiscal que probablemente ofrezca pocos detalles sobre
cómo compensar los recortes sin aumentar el déficit federal.
Pulido
durante meses de negociaciones entre los asistentes de Trump y los
principales representantes de los Republicanos en el Congreso, el plan
que se desvelará en un acto en Indianapolis previsiblemente propondrá un
impuesto sobre sociedades del 20 por ciento y un tipo máximo reducido
al 35 por ciento para las personas físicas.
Aunque
reducirá el tipo máximo para personas físicas desde el 39,6 por ciento,
el plan también duplicaría la deducción habitual, una cantidad de renta
exenta de tributación, para todos los contribuyentes.
“Tienes
que mirar el plan en conjunto. Duplica la deducción habitual, así que
al final incluso las rentas más bajas tienen una reducción de
impuestos”, dijo Jim Renacci, Republicano en el comité de la Cámara de
Representantes que trabaja sobre el asunto.
Los
Republicanos dirán que los recortes, ampliamente filtrados a los medios
por varias fuentes en los últimos días, estarían compensados por nuevos
ingresos al eliminar vacíos legales, aunque se espera que se
identifiquen pocos o ninguno de ellos en el plan.
Los
Republicanos previsiblemente vaticinarán que las rebajas fiscales de
Trump, si logran la aprobación del Congreso, llevarían a un crecimiento
económico más fuerte, algo que los las voces críticas pondrán en
cuestión.
En
un momento de expansión lenta pero estable en la economía del país, el
plan de Trump tiene apoyo en el Congreso, incluso entre el ala dura de
los Republicanos que hace poco se oponían a propuestas fiscales
financiadas con déficit fiscal.
Trump
y sus aliados hicieron de la reforma fiscal una de sus principales
promesas de campaña en las elecciones de 2016 y ahora afrontan un
creciente presión para completarla desde que fracasó el último intento
Republicano de derribar la ley sanitaria Obamacare.
ADVERTENCIAS SOBRE DÉFICIT
El
presidente Republicano previsiblemente intente vender sus propuestas
como beneficiosas para los trabajadores estadounidenses diciendo que
impulsarán el crecimiento económico, crearán empleo y aumentarán los
salarios.
El
impuesto de sociedades se sitúa ahora un 35 por ciento por ley. Es una
tasa alta según los estándares mundiales, y las empresas han buscado una
rebaja desde hace años, aunque muchas de ellas pagan mucho menos que el
tipo de referencia debido a vacíos legales y exenciones fiscales.
Los
negocios cuyos beneficios son pasados directamente a sus propietarios
tendrán ahora un nuevo impuesto, que a menudo se situaría en el nivel
máximo del 39,6 por ciento.
Los
analistas han advertido de que unas grandes rebajas de impuestos
podrían engordar el déficit federal y la deuda si el crecimiento
económico proyectado por los Republicanos no logra materializarse en un
contexto de tipos de interés al alza.
Un
análisis preliminar del plan de Trump por parte del ‘think tank’ Tax
Foundation estimó que reduciría los ingresos federales en casi 5
billones de dólares en una década.
Trump
dijo el martes a Republicanos y Demócratas en comisión parlamentaria
que quería que la reforma fuera consensuada entre ambos partidos.
El
plan fue desarrollado por un pequeño equipo de Republicanos a puerta
cerrada y sin participación de los Demócratas. No estaba claro hasta
dónde cederían los Republicanos en el Congreso para acomodar las
exigencias de los Demócratas sobre la neutralidad de los ingresos y que
no haya reducción fiscal para los ricos.
“Trump
pidió a los Demócratas que se subieran al tren de los impuestos cuando
ya había salido de la estación. No vi a ningún Demócrata dispuesto a
subir a bordo”, dijo el representante Demócrata Lloyd Doggett tras la
reunión.
No hay comentarios:
Publicar un comentario